¡Suscribite al newsletter!
Soy de los que consideran que para hacer bien las cosas, hay que tener un plan. Creo que, con suficiente control y medición de las cosas, cualquier proyecto puede funcionar, o ser abortado a tiempo. Cuando seguimos derrochando recursos (tiempo, salud y dinero) en cosas que no funcionan o que no dan el rédito esperado, es entonces cuando tenemos un problema.
ÁnimaData no tiene una razón de ser específica. Y está bien, Ánima siempre fue algo que hice por gusto, para distraerme. No generó dinero por sí solo, pero sí un gran grupo de gente con quienes compartimos nuestras alegrías y quejas del sistema en el que vivimos.
Sin embargo, en estos últimos 3 meses, veo como la cantidad de gente a la que este blog llega cae estrepitosamente, mientras que también, con los videos de Ánima, pasa exactamente lo mismo: el último, publicado el miércoles pasado, sólo tuvo 28 visitas.
“Lo hago para mí” es una verdad a medias. Nunca me importó mucho la crítica ajena sobre mi escritura, pero si quiero escribir para mí sólo, lo haría en un blog de notas.
No quiero y no voy a dejar de escribir, pero sí considero que esta estrategia no es correcta. Me voy a tomar entonces dos meses de vacaciones del blog. Espero volver a mediados de Enero con algo, quizás otro formato. No tengo idea.
Mientras tanto, siempre podés seguirme en LinkedIn.
Desde Ánima queremos ayudar a una fundación sin fines de lucro que promueve el aprendizaje de las personas que menos tienen.
Por eso, toda donación recibida durante 2024 será donada a la Fundación Fonbec, que podés investigar acá.
Compartiendo la nota, dando like o comentando abajo, nos ayudás un montón. También aportás suscribiéndote a nuestro canal de YouTube.